jueves, 25 de junio de 2015

OTRA VEZ




Otra vez tropecé 
en las líneas de la vida, 
y caí de bruces sobre el cielo.

Otra vez escribí 
abstraída tu nombre, 
y llamé al silencio.

Otra vez mi llanto 
mojó mi almohada,
y desperté del sueño.

Otra vez encontré 
el motivo, por el que 
seguir viviendo.

miércoles, 24 de junio de 2015

LA MUSA DEL JARDÍN



Sólo el canturreo de una melodiosa voz guiaba sus pasos por el laberíntico jardín.

Cada paso dado entre la enmarañada madre-selva, que colgaba de las ramas del esquelético árbol seco que presidia el parterre, lo acercaban a la voz que parecía llamarlo. Andaba dando vueltas que siempre lo llevaban al mismo lugar, frente a un muro de piedra ennegrecida y cubierto de musgo, decidió desandar el camino sobre sus propios pasos, cerrar los ojos y guiarse sólo por el sonido de aquella voz.


Al momento se encontró frente a una fuente de agua cristalina, de donde parecía brotar la melodía, tímidamente se acercó, sus labios dibujaron una sonrisa:


- Sabía que eras tú, la musa que robó mi corazón e inspira mis versos de amor, se sentó en el borde removió el agua y la voz calló.

Con las manos metidas en los bolsillos y silbando aquella melodía se fue alejando. Entre las ondas del agua que tímidamente se deshacían, se reflejaba la luna y la melodiosa voz volvió a resonar entre las tapias del jardín de los enamorados.

SU SON




Hasta las piedras del camino 
tienen corazón,
y las espinas terciopelo
en su afilado punzón.

Hasta el dulce néctar
su final es amargor,
y la seda al tacto
el frío en su percepción.

Hasta el mar en su belleza
esconde su traición, 
y el cobarde en su miedo 
un relámpago de valor.

Hasta la oscuridad de la noche
en la luna su iluminación,
y el infierno del desierto
en la noche su refrigeración.

Hasta el rotundo silencio 
en el sigilo tiene su son,
y un corazón roto
en otro amor su salvación.